Ahora hablaremos de las partes de las que consta un TPV Modular:
Monitor: Puede ser uno normal o que se lleve consigo un sistema táctil, lo que hoy en día es mucho más cómodo dado que se elimina la existencia del ratón y es mucho más rápido a la hora de actuar. Hay diferencias entre la calidad de los materiales usados, su tecnología y la vida media.
Teclado: Puede ser de dos tipos, un teclado normal o uno más pequeño por temas de espacio. Lo mejor es tener teclados específicos para los TPVs configurables y posibilidad de incorporar imágenes en las teclas para facilitar el trabajo.
Impresora de recibos: Expide el recibo o el resguardo de compra de cliente. Suele haber de tres tipos: matriciales, térmicas o de tinta. Las matriciales son muy lentas, aunque su virtud es que son económicas, y la impresión es realizada por impacto. Las térmicas son bastante más rápidas y versátiles y permiten la impresión de logotipos. Mientras que las impresoras de tickets, son muy utilizadas para el envío de comandas a la cocina. Se fabrican en acero inoxidable y a veces incluso tiene señal acústica para el aviso de entrada del pedido.
Cajón portamonedas: Los más habituales tienen un puerto RJ11, que es el que incorpora la propia impresora de tickets. Este cajón se abre automáticamente en el momento del cobro. Hay otro modelo que se conecta directamente a la CPU y se abre manualmente con la llave o por impulsos. También hay otro modelo, muy similar a una caja fuerte, tiene un gran espesor por sus carcasas de acero. También existen los cajones verticales para espacios reducidos o los terminales de control de efectivo donde el cliente es que realiza el pago y se le da la devolución del cambio.
